El Raclette es un exquisito queso suizo, de hecho, un plato que caracteriza la particular comida de éste país. Éste queso, es fabricado cuidadosamente de la manera más tradicional, por vaqueros y queseros, quienes pasan todo el verano preparando el raclette en las montañas. Antes, el Raclette era la comida de los pobres y la fabricación de éste como muchos quesos suizos, era la posibilidad de conservar la leche para las siguientes estaciones, además de procurar, también, su comercialización. El Raclette, o la Raclette, tradicionalmente se preparaba, partiendo a la mitad los quesos de 15 kilos de peso; después se ponían directo a la brasa de leña, para esparcirse, luego de su proceso de derretido al fuego, sobre pan o papa. Hoy, al ser parte de la exquisita comida suiza, se han agregado otros ingredientes que potencian el sabor del Raclette, incluso, comer piña con una delgada capa de éste queso, produce una excelente combinación que sorprende al paladar de cualquier comensal.
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